Las pelucas se han usado
mucho a lo largo de la historia. Pero no siempre han sido iguales.
Antiguamente lo usaban los reyes, los nobles y el clero, es decir,
los privilegiados. Eran demasiado extravagantes debido a su tamaño.
Hoy en día usan para los disfraces o para aparentar tener pelo.
Suelen ser sintéticas, aunque hay gente que dona su cabello para
hacer pelucas para los niños con cáncer.
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