En definitiva, a mi familia más cercana. A mis padres se les sumó una nueva responsabilidad. Ahora, a parte de criar a una hija, tenían que hacer lo mismo conmigo. También cambié la vida de mi hermana: a partir de mi llegada, ella tuvo que compartir la atención que recibía, sus cosas, y tuvo que empezar a comportarse como una hermana mayor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario